Rusia, 1917. Recién salido de la escuela de medicina, un joven médico es enviado a un remoto poblado en medio de la nada para manejar un pequeño hospital. Su primer caso llega a la mitad de su primera noche: una campesina con un parto complicado.

Poco a poco, el joven médico abandona sus sueños. Su ambición de hacer descubrimientos médicos se ve frustrada al luchar contra una epidemia de sífilis entre campesinos hostiles sin educación. Su espíritu permanece intacto hasta una cirugía brutal.

La vida en el hospital sitiado por la nieve hace mella en él. Sus esfuerzos para luchar contra el aburrimiento y el aislamiento son vanos ¿cuánto tiempo más soportará? Luego de dos casos terribles, se ve tentado por el encanto de la morfina.

Al joven doctor le resulta muy difícil ocultar su adicción ante sus colegas. Tras una sucesión de eventos humillantes, decide comenzar de nuevo y dedicar sus esfuerzos a combatir la epidemia de sífilis. Pero deberá enfrentar sus peores miedos.

El hospital se entera de que Zemstvo va a pasar una inspección, lo que desata el pánico en el joven médico y en Pelageya, que temen que se descubra que les falta morfina.

El joven médico, que intenta desesperadamente reponer sus reservas de morfina, conoce a una bella aristócrata, Natasha, que invita al personal a una cena. Él se obsesiona y la acusa de alimentar su adicción a la morfina.