Lockhart-Gardner se encarga del gobierno de los EE.UU para un contratista militar que clama que fue torturado por el ejército en Afganistán.
Alicia ayuda a Bishop, un narcotraficante, con su divorcio y la custodia de sus hijos. Aunque él todavía cree en la reconciliación con su mujer. El bufete no puede permitirse perder este importante cliente. A la vez, citan a Kalina delante de un gran jurado para una investigación.
Ray intenta recuperar sus relaciones. El diagnóstico médico de Abby altera la vida de la familia.
Cuando alguien cercano a Alicia desaparece, se da cuenta que tiene que tomar una decisión difícil. Kalinda hace un movimiento que la pone de nuevo cerca de Alicia.
La ayuda legar de Lockhart-Gardner ofrece apoyo a una mujer policía acusada de dispararle a su esposo para cobrar el seguro.