Durante tres siglos, las cuestiones y las luchas políticas se han centrado en la producción y la distribución de la riqueza. Estos principios son heredados de la burguesía, que se definía a sí misma como "más racional" que la aristocracia. La clase ecológica, una nueva clase social en gestación, los juzgará como irracionales, puesto que amenazan la habitabilidad del planeta.
Es en el laboratorio donde surgen los descubrimientos y los hechos científicos. La práctica científica está demostrando ser una herramienta formidable. A través de las hipótesis, las probabilidades, los experimentos y la revisión por pares, surge la certeza y el hecho se vuelve "verdadero". La “Ciencia” con mayúscula no existe, lo que sí existe son las prácticas científicas.
En un momento en el que la falta de representatividad política es flagrante, ¿cómo participa la palabra individual en el pensamiento colectivo? Tenemos que unirnos y crear espacios donde todas las disciplinas sean iguales. Así, podremos recoger y combinar sus conocimientos respectivos, dar a todos voz y voto en la materia, y construir el mundo del mañana.
Formar colectivos es un proceso omnipresente en nuestras vidas. No obstante, reunir a una multiplicidad de personas para hablar con una sola voz implica traiciones y metamorfosis. Debemos aceptar que una opinión personal y un orden dado pueden ser transformados, "mediados". Esta es la condición para entrar en política y ser verdaderamente un colectivo.
Camille De Chenay
Dirección
Nicolas Truong