Historias de Dunhuang

Hay momentos en la Historia en los que el destino del planeta puede depender de un solo hombre. Hace dos mil años, durante la dinastía Han, ese hombre fue Ban Chao.

Durante la dinastía Wei, la última frontera de China se desmorona. Los mercaderes extranjeros están siendo estafados y robados, y Dunhuang está perdiendo su reputación como lugar de negocios en la Ruta de la Seda. Desesperado por recuperar el control, el emperador Cao Rui ordena a un veterano pero envejecido funcionario, Cang Ci, que acabe con la corrupción y la violencia en la ciudad.

Cuatro siglos después de que fueran derrotados por el gran general chino Ban Chao, los hunos vuelven a poner en el punto de mira a la ciudad de Dunhuang, esta vez liderados por su poderoso señor, Juqu Mengxun.

Ninguna mujer se había sentado antes en el trono del dragón... hasta que llegó Wu Zetian. Durante la dinastía Tang, una joven concubina se inspiró en los cuentos del monje Xuanzang sobre su viaje a la India para urdir un plan que le permitiera arrebatarle la corona a su hijo y convertirse en la primera emperatriz de China. Desde entonces, no ha habido ninguna mujer como ella.

Han pasado mil años desde la esplendorosa dinastía Tang. Las cuevas de Mogao han sufrido mucho el paso del tiempo, pero, en 1900, los secretos de Dunhuang son revelados cuando el monje taoísta Wang Yuanlu abre la Cueva de la Biblioteca y aparecen sus innumerables manuscritos. Se los enseñará después a un asombrado arqueólogo británico, Aurel Stein.

Hace 2000 años, la antigua fortaleza desértica china de Dun Huang controla el acceso del Imperio Han a la lucrativa Ruta de la Seda.