Tesoros perdidos de Roma

Los arqueólogos se embarcan en nuevas excavaciones en Pompeya para desentrañar las historias de las personas que vivieron y murieron aquí. Corren contrarreloj para desenterrar una calavera de sacrificio, descubrir pistas de la tumba y el cuerpo momificado de un esclavo liberado curiosamente rico, y aventurarse en los túneles asfixiantes y estrechos bajo la casa de baños central.

¿Cómo llegó Roma a dominar gran parte de la civilización antigua? Frente a la costa de Sicilia, los investigadores descubren los rastros de una batalla naval crucial. Con la ayuda de buzos, un robot submarino y una grúa, sacan a la superficie una reliquia de un buque de guerra perdido hace tiempo. En Terracina, al sur de Roma, un equipo de arqueólogos excava en el interior de un antiguo templo en la cima de una montaña, y en Cartago, Túnez, las pistas revelan cómo una rivalidad mortal inclinó la balanza del poder a favor de Roma.

¿Cómo se convirtió el Coliseo, un anfiteatro para sangrientas batallas de gladiadores, en el mayor símbolo del Imperio Romano? Los arqueólogos se adentran en las ruinas del Coliseo y realizan excavaciones por todo el Imperio en busca de pistas. A medida que los equipos descienden a túneles ocultos y desentierran anfiteatros perdidos hace mucho tiempo en la Toscana y Gran Bretaña, van reconstruyendo la sorprendente verdad sobre el emblemático Coliseo de Roma.

Enterrado bajo Roma se encuentra un tesoro olvidado: la Casa Dorada, un gran palacio construido en el siglo I d.C. Fue la construcción más extravagante de la historia de Roma. ¿Por qué se enterró? ¿Y qué puede revelar su destino sobre su constructor, el emperador más famoso de Roma, Nerón? Mientras los expertos se apresuran a salvar los restos de la Casa Dorada, los arqueólogos descubren nuevas pistas sobre su destino y su conexión con la reputación de Nerón.

El muro de Adriano es la mayor estructura que han construido los romanos. Con una extensión de 117 kilómetros a través de Gran Bretaña, en su día definió el límite norte del mayor imperio que el mundo había visto. Ahora los expertos investigan el muro, sus fortalezas, casas de entrada y ciudades de guarnición, para revelar cómo crecieron la civilización y la cultura en la salvaje frontera de Roma. Sus sorprendentes descubrimientos muestran cómo era la vida, y la muerte, en el dinámico y siempre cambiante borde del imperio.

La mortífera erupción volcánica que sepultó Pompeya en el año 79 d.C. también se cobró otra víctima: Herculano. Situada más cerca del cráter del Vesubio, esta ciudad costera quedó cubierta de cenizas cinco veces más gruesas que Pompeya, aunque milagrosamente se conserva aún mejor. Ahora, el descubrimiento de un esqueleto intacto, el primero excavado en 25 años, ayuda a los investigadores a reconstruir las últimas horas de Herculano y a desentrañar por qué el Vesubio atacó tan violentamente aquí.