LOS LEONES DE SICILIA
Los hermanos Paolo e Ignazio Florio dejan Bagnara, en Calabria, donde reina la pobreza, y se mudan a Palermo, donde abren un herbolario y se hacen ricos enseguida. Sin embargo, el hijo de Paolo, Vincenzo, transforma el apellido Florio en un auténtico imperio durante los años que precedieron a la Unificación de Italia. Impulsado por su deseo de triunfar, aspira a que la nobleza de Palermo lo trate como a un igual, una aspiración que le exige casarse con una aristócrata. Sin embargo, se enamora locamente de Giulia Portalupi, de clase media, y sacrifica esa aspiración a la nobleza. Su único hijo varón, Ignazio, será el encargado de preservar el apellido Florio.