En una época donde hay vallas alrededor de todo, y se nos niega el instinto de supervivencia, es difícil encontrar un lugar libre de reglas y restricciones, pero no imposible. Las películas de surf van y vienen, millones de olas en lugares exóticos y riders surfeando durante tres días con un swell perfecto , pero el espíritu de aventura nunca muere. Lo que comenzó como un viaje de tres meses y una recopilación de surf breaks desconocidos, se convirtió en una odisea de dos años de exploración, lesiones, compañerismo y 4.000 kilómetros sobre dos ruedas, el escape perfecto para evadir las cargas de la vida real moderna. Harrison Roach y Zye Norris meten las maletas, las tablas, dos bicicletas y una tienda de campaña de 50 dólares en un Land Rover de los 70 y se embarcan en una búsqueda épica desde el sur de Bali, a través del archipiélago de Indonesia, hasta la aislada bahía de Lagundri al norte de Sumatra. Surfeando, en bicicleta, en barco y sobre las 4 ruedas, el viaje de la pareja es descubrir si, en estos días de GPS y Wi-Fi, el sueño de una verdadera aventura surfera sigue vivo.
