Mark todavía no ha reunido el coraje para dejar a Sophie, algo que resulta ser un problema cuando van al campo a encontrarse con sus padres.
Es el día de la gran boda y Mark busca desesperadamente una forma de escaparse, pero está decidido a que no digan que la está plantando a toda costa.
Mark y Sophie regresan al trabajo después de su desastroso día de bodas, pero Mark está decidido a tergiversas las cosas para demostrar quién debería tener toda la culpa.
Mark invita a Dobby a una fiesta en su piso y luego tiene que averiguar cómo la organizará. Mientras tanto, las cosas se han vuelto un poco frías entre Jez y Elena.