Don't Call Us A JUNK GAME!

Los héroes y heroínas del juego descubren, para su sorpresa, que su juego es considerado basura.

Pese a las críticas, aún hay gente que juega al juego. Y cada vez surgen opciones más disparatadas.

La improvisación del rey provoca la aparición de un nuevo personaje: una sirvienta un poco atolondrada.

El jugador está tomando decisiones muy extrañas, como la de no luchar contra los monstruos.

Mina ha "evolucionado" y ha dejado de ser una simple sirvienta. Y parece que su fuerza rebasa cualquier límite.

Mientras siguen adelante con el juego, aparecen dos de las protagonistas femeninas.