Hechizada

Samantha y Darrin aparentan ser la pareja ideal. Muy enamorados, deciden casarse. Darrin no sabe que Samantha es una bruja. En su noche de bodas, la madre de Samantha, Endora, una bruja, por supuesto, visita a su hija.

Endora quiere que Samantha use sus poderes para hacer frente a las tareas rutinarias del hogar. Ante el problema de hornear un pastel, Samantha decide recurrir a la brujería, que viene muy bien cuando inspecciona la casa que Darrin planea comprar.

Samantha organiza una fiesta para impresionar a Rex Barker, uno de los clientes de Darrin, quien trae a su chica, Babs Livingston, pero se le insinúa en el jardín cuando se emborracha. Barker se vuelve agresivo y Samantha lo transforma en perro.

Gladys Kravitz, una vecina, no puede convencer a su esposo de que están sucediendo cosas extrañas en la casa de los Stephens. Gladys y compañia visitan la casa de los Stephens para darle la bienvenida a Samantha a la comunidad.

Darrin busca crear una campaña publicitaria para la Sopa Caldwell. Las sugerencias de Samantha parecen perfectas, pero el orgullo de Darrin lo lleva a sospechar de brujería. Entonces le presenta sus propias ideas a Phillip Caldwell, quien las rechaza.

Darrin descubre que Samantha ha estado recibiendo a un invitado de diez años cada mañana después de que él se va a trabajar, Burns Marshall. La madre es una viuda cuya sobreprotección le ha robado toda la confianza en sí mismo.