Criminales por naturaleza

Al Capone tal vez sea el mayor símbolo del colapso de la ley y el orden en Estados Unidos de los años 20, durante la Ley Seca. Para el FBI, el rey del contrabando de bebidas era el enemigo número uno del país.

George Francis Barnes Jr, más conocido como "Macine Gun Kelly", fue un gánster de origen irlandés en la época de la Ley Seca de los Estados Unidos. El apelativo viene de su arma favorita, una subametralladora Thompson.

Bonnie Parker y Clyde Barrow están entre los forajidos más famosos de la historia. Este par de asesinos y asaltantes robó numerosos bancos, gasolineras y tiendas en zonas rurales y asesinó a al menos nueve víctimas en el proceso.

John Dillinger fue el criminal más descarado durante la Gran Depresión y tal vez el más brutal. En 1933 arrasó el estado de Indiana: robó miles de dólares a bancos y asesinó a una docena de personas.

El tristemente célebre criminal Pretty Boy Floyd estuvo implicado en más de 30 robos a bancos y en unos 20 asesinatos. Aunque para algunos fue un héroe folclórico, se convirtió en el enemigo público número uno al morir John Dillinger.

Lester M. Gilis, alias Baby Face Nelson, comenzó su carrera criminal muy joven en una pandilla callejera en los suburbios de Chicago. Su apodo significa rostro de bebé porque parecía mucho más joven de lo que era en realidad.