Ashraf Farah

La vida de Jamal corre peligro y Abuddin se encuentra al borde del caos, por lo que tanto Exley como Molly instan a Barry a dar un paso al frente como presidente interino antes de que se produzca un golpe. Leila y Ahmed son puestos bajo arresto domiciliario en el palacio por los militares, que quieren que los Al-Fayeed sean juzgados, y Barry y Rami no tienen más remedio que aceptarlo para mantener la lealtad del ejército. Barry se dirige a la nación como el nuevo presidente y prepara todo para las elecciones democráticas. Sin embargo, arrastrados por las mareas de la venganza, los líderes del ejército sobrepasaron sus límites para asegurar la paz, como en caso del arresto del jeque Al-Qadi, líder religioso, que es acusado por Siddiq de alentar a sus seguidores a apoyar al califato durante la ocupación. Barry visita a Daliyah con un controvertido plan para romper el ciclo de venganza en Abuddin, y le da un papel principal en su plan, uno que la acercará a él. Ella acepta a regañadientes, inquieta por su nueva reputación como mártir de la revolución. Y los planes de Barry pueden plantar la semilla de su ruina, incluso antes de comenzar. Mientras Leila busca un puesto en el nuevo Abuddin, llega Cogswell, un general estadounidense que tiene una historia con ella.

A Barry le preocupa que la presencia de Cogswell y sus tropas estadounidenses socave su autoridad ante los ciudadanos de Abuddin. Ahmed, afligido, entierra a Nusrat en una tumba sin nombre, que fue lo único que le permitió Leila, mientras Jamal, todavía postrado en cama y bajo atención médica constante, es llevado al palacio. Sammy se inscribe en una clase sobre la historia de Abuddin... y se enciende una chispa de atracción entre él y su profesor, Haitham. Fauzi regresa a Abuddin, y su estudiante, Halima, le sugiere que se postule para presidente de Abuddin... y Barry está de acuerdo. Pero es solo la confesión de Barry de su papel en la muerte de Samira lo que persuade al devastado Fauzi a huir. Cuando los antiguos amantes Cogswell y Leila se vuelven a encontrar, Cogswell le pide a Leila, ahora secretaria de Relaciones Exteriores, que convenza a Barry para que acepte la ayuda de los EE. UU. Mientras tanto, Ihab, que ha escapado al territorio del califato en Siria, tiene la oportunidad de vengarse de Barry cuando el jeque Abdullah secuestra a la familia del conductor de Molly, Jalal. Molly escapa, pero Emma es secuestrada... lo que traerá terribles consecuencias para el futuro de Abuddin.

El plan de Molly de entregarse como prisionera a cambio de Emma es descubierto y utilizado por Cogswell, y habrá consecuencias para muchos, incluido Al-Qadi. Fauzi visita a Daliyah cuando comienzan las Comisiones de la Verdad y la Dignidad, y quiere saber más sobre la noche en que Samira murió. Los dos se hacen amigos, y Fauzi se anima a esperar un romance en el futuro. Mientras crece el peligroso y prohibido romance de Sammy y Haitham, Halima se enfrenta al rechazo público de sus ideales. Mientras Jamal agoniza, Ahmed es su mayor esperanza para un trasplante de riñón; indeciso, Ahmed analiza el pasado de su padre. E Ihab, arrinconado, arremete y realiza el único acto de justicia que siente que puede tener.

A raíz de la muerte de Emma, Barry manifiesta a Cogswell su voluntad de matar a Ihab y al jeque Abdullah... justo cuando Al-Qadi lanza su campaña para presidente, afirmando su deseo de una tierra de paz y tolerancia. Fauzi visita a Barry por primera vez desde la confesión de este para consolarlo por la pérdida de su hija y decirle que va a postularse para presidente. Molly se obsesiona no solo con matar a Ihab, sino con recuperar el cuerpo de Emma, ​​una tarea difícil, y comienza a desmoronarse bajo la tensión de su dolor. La hermana separada de Leila, Safiya, viene de visita, aunque sus razones son más mercenarias que familiares. Mientras Sammy y Haitham ceden a sus deseos, Fauzi y Leila lanzan sus campañas políticas con fervor; Fauzi predica la esperanza y la tolerancia, mientras que su director de campaña, James Kipfer, le aconseja a Leila que se base en el miedo. Poco después, le confiesa un secreto familiar a Ahmed. Y cuando Ihab y Abdullah entran en un edificio que Cogswell identifica como un campo de entrenamiento terrorista, Barry da una orden que amenaza con desestabilizar al país, lo que lleva a protestas violentas.

Leila no está contenta cuando Daliyah la llama para testificar en la Comisión de la Verdad y la Dignidad durante su campaña presidencial, especialmente porque Leila va segunda en las encuestas, detrás de Fauzi. Leila advierte a Daliyah que no confíe en el amor de Barry... incluso cuando Fauzi se está enamorando de Daliyah. Molly, incapaz de soportar el dolor provocado por la muerte de Emma y su subsecuente deseo de venganza, decide buscar ayuda... que implica dejar el palacio y el país. A raíz de los frustrados ataques terroristas llevados a cabo por aquellos enfurecidos por el ataque de gas de Barry en Ma'an, el general Maloof convence a Barry de prohibir orar en público en la Universidad, lo que provoca una severa reacción. Por insistencia de su esposa Nafisa, Al-Qadi se pronuncia contra la violencia de Barry y la restricción de la libertad religiosa, mientras trata desesperadamente de evitar que estalle la violencia cuando los militares se presentan en su mitin. Haitham también le deja claro a Sammy que no está de acuerdo con las nuevas políticas de Barry, mientras que Halima decide que los llamados de Al-Qadi a la oración pacífica no son suficientes. Se intensifica la campaña de Leila… al igual que su relación con Cogswell. Cogswell, al ver la tendencia de las elecciones, se acerca a Fauzi. Y desamparado y solo, Barry recurre a Daliyah en busca de consuelo.