Laura Leigh Hughes

Rossi cuestiona sus acciones en la secuela de una lucha casi mortal con un asesino en serie que fue más astuto que la UAC.

Patrick tiende una trampa para atrapar al responsable del asesinato una estrella fútbol americano la escuela.

Brennan y Booth son llamados al lugar de una explosión en un hotel de Miami, donde una joven fue quemada hasta la muerte. Inicialmente, se cree que la explosión fue obra de un cártel de drogas colombiano que pretende atacar a la jueza Dolores Ramos, la representante judicial colombiana. El funcionario del Departamento de Estado Alex Radziwill insiste en que todo tiene que ver con la jueza Ramos y el caso pasa por él, lo que se vuelve molesto y problemático cuando se interpone en el camino de Brennan y Booth mientras hacen su trabajo en busca de información clave sobre el caso. Cuando los dedos señalan al marido y al hijo de Ramos, Booth y Brennan se sorprenden al saber quién estaba detrás del complot asesino, y hasta dónde llegará el Departamento de Estado para proteger a un sospechoso de asesinato.

Catherine y Keppler investigan el asesinato de una adolescente sin identificar y ambos están de acuerdo en que el asesino, que fue meticuloso al eliminar las pruebas del cuerpo y sus alrededores, es probablemente un delincuente reincidente. Pronto, ellos y el resto del equipo de CSI descubren tres casos similares sin resolver que sugieren que el asesino en serie ha estado activo desde 1975.

Un evento extraño en la famosa "Área 51" hace que Mulder intercambie su conciencia con la de un desconocido.