Están Entre Nosotros

Rebeca es una mujer que ha acumulado grandes riquezas mediante el engaño y la usura. A la vecindad de Rebeca llega Martín quien comienza a ayudar a los vecinos, él trae un bolso de dónde saca dinero, esto se convierte en la obsesión de Rebeca y para podérselo robar lo mete a la cárcel.

Rex es un secuestrador. Siempre lleva a los que secuestra a una fábrica abandonada; ahí se encuentra Martín, el velador quien los protege y los ayuda a escapar. Los secuestrados son devotos de San Martín Caballero. Rex, busca matar a Martin, este le ofrece redimirse, Rex se burla y le dispara... Rex sin entender queda encerrado en un lugar oscuro, sin salida y sin esperanzas.

Julieta una actriz bella y arrogante, practica la hechicería. Hace un pacto con El Catrín para dañar a Citlalli, una jovencita, que le acaba de ganar el papel protagónico de una obra de teatro. El precio que Julieta tiene que pagar es sufrir en carne propia todo el mal que desea para Citlalli. Citlalli es devota de San Benito quien la libra de Satanás.

Carlos ha mantenido en silencio su condición de VIH positivo. Diana, su esposa, lo culpa porque cree que se infectó por mantener relaciones sexuales y porque en su irresponsabilidad la infectó a ella y al hijo que esperan. La madre de Carlos se lo encomienda a la Virgen del Perpetuo Socorro.

Rosendo por un supuesto milagro vuelve a caminar, engaña a sus vecinos proclamando que San Judas Tadeo lo curo. Valiéndose de esto comienza a sacar provecho económico, con tal de no verse descubierto llega hasta el crimen, su mentira comienza a rebasarlo hasta que una luz lo guía a una falsa salida donde encuentra una puerta paralela a la muerte.

Francisco joven rico e irresponsable. Viola a Rosa. Ya detenido se encuentra con un mendigo que le dice que él lleva las llagas en el alma y que el principio de la redención es el arrepentimiento. Francisco busca a Rosa para pedir perdón, descubre que Rosa se suicidó. Francisco, arrepentido toma acción de sus errores y llega a él un final inesperado.