Treinta años después de la última muerte sospechosa en el pueblo, las vidas de los residentes de la pacífica St. Michael se ven sacudidas de nuevo cuando comienzan a producirse extraños asesinatos sobrenaturales. Cuando Tamara, la detective a cargo del caso, descubre que su madre, Lea, estuvo involucrada en este incidente del pasado y confesó haber matado a sus amigos, comienza a enfrentarse a un oscuro juego mortal que revelará secretos muy cercanos a todos los involucrados.
