Niños ricos, pobres padres

La vida de Alejandra cambia cuando deportan a su madre y decide irse con ella para iniciar una nueva vida. No imagina el alto precio que tendrá que pagar por aceptar la invitación a una fiesta.

Anaís encuentra a Alejandra en una de las habitaciones de la casa, drogada y desnuda, y corre a buscar ayuda. David le reclama a Santiago no preocuparse por su prima, sabe que le harán daño.

Alejandra se enfrenta con la verdad cuando Anaís le confiesa que todas en la escuela han pasado por lo mismo. Esteban asume una falsa personalidad para acercarse a la recién llegada.

Una mala decisión pone en peligro la vida de Alejandra. David, acosado por la situación económica en casa y el alcoholismo de Rafael, no tiene más remedio que aceptar la imposición de Esteban.

Alejandra le pide a Esteban que le mienta a la doctora, debe evitar que la verdad salga a la luz, él se entera de que algo más pasó la noche de la fiesta. David descubre a su hermana.

David debe dar la cara por Lola, quien está involucrada con gente muy peligrosa. Una reunión de padres en la escuela deja a los muchachos en evidencia, pero ellos insisten en no disciplinarlos.