Ducky hace un descubrimiento impactante cuando finalmente identifica tres cadáveres mutilados meses atrás metidos en barriles.
Gibbs y el equipo son llamados cuando aparentemente se suicida un criptógrafo del Pentágono sospechado de espiar. Con su principal sospechoso muerto, el equipo del NCIS debe descubrir si ella era o no el topo del Pentágono.