El murió con un falafel en su mano
La película narra las caóticas aventuras de Danny, de 30 años, en una sucesión de viviendas compartidas en diferentes ciudades australianas con un elenco cambiante de personajes inciertos. A través de esta colección de anécdotas, la película construye una reflexión sorprendente y cómica sobre la búsqueda del amor y el sentido de la vida.
