Kenny decide dejar sus sueños de volver al béisbol. Pero su determinación es puesta a prueba por la dueña de la distribuidora de autos.
Para evitar la venta de su moto acuática, Kenny busca trabajo como vocero de una lujosa distribuidora de autos para ganar dinero.
En la quiebra, el ex pitcher grande liga Kenny Powers regresa a su ciudad natal para enseñar educación física en la escuela donde estudió.
Kenny revive su carrera como beisbolista junto a su compañero de fiesta Shane. El cumpleaños de su hijo Toby servirá para un reencuentro.
Cuando April y su novio, Cutler, organizan una parrilla, Kenny busca la oportunidad de encender la vieja llama del amor.