Esta mirada divertida y honesta a la vida familiar moderna muestra cómo el juego imaginativo ayuda a formar niños sanos. La perra pastor ganadero australiano, Bluey, tiene una imaginación sin límites y le encanta convertir la vida diaria en divertidas aventuras. Ella y su hermana menor Bingo se lanzan a explorar su mundo, usando el juego para conquistar sus miedos y probar roles de adultos. Y nada les gusta más que involucrar a sus padres, especialmente a su papá, en sus juegos y diversiones. Su mamá, Chilli, ha vuelto al trabajo y su papá, Bandit, hace malabares con el cuidado de sus hijas y el trabajo desde casa. Pero aunque él crea que está a cargo, las chicas definitivamente toman las decisiones cuando se trata de jugar, ¡y casi todo lo demás!
