Por azares del destino, el príncipe heredero Lee Shin ingresa a la misma escuela secundaria donde está Shin Chae-kyeong y forman un extraño vínculo. Por otro lado, el príncipe tiene una enorme presión ya que, para mantener la monarquía, debe casarse.

Parece ser que el príncipe Lee Shin no toma tan en serio la necesidad de contraer matrimonio y pretende divertirse con Chae-kyeong y sobajarla. Ante el anuncio del compromiso entre ambos, la atención de la prensa se volca sobre ella e intenta evadirlos.

La situación en el palacio real es complicada ya que el príncipe Lee Shin no soporta que Chae-kyeong llore por su familia y le promete divorciarse. La relación entre ambos es difícil, ya que la nueva princesa no está acostumbrada a ese estilo de vida.

Los amigos del príncipe quieren saber qué fue lo que sucedió con Chae-kyeong y después Hyo-rin habla con él para mostrarle su arrepentimiento. Chae-kyeong habla con su familia, pero se siente muy vacía a pesar de ser muy afortunada con todo lo que tiene.

El príncipe Lee Shin discute con Chae-kyeong y le dice que sabe que se casó con él por dinero y al admitirlo con coraje, le hace una advertencia. Después, Chae-kyeong siente que usurpó el lugar de Hyo-rin y que ellos pudieron ser felices juntos.

Chae-kyeong no se adapta a la vida imperial y forma lazos más estrechos con Lee Yul, pero el príncipe heredero no lo toma a bien y se burla de ella. Por un momento, parecería que ambos son rivales de la misma mujer, probablemente una nueva cenicienta.