El río Misisipi nunca vio tantos acontecimientos inesperados como en este viaje en barca animado y extravagante, protagonizado por el rey del rock Elvis Presley y la preciosa Donna Douglas de Los Beverly ricos y rústicos en Dinerolandia. Con la desopilante actuación de Harry Morgan (M.A.S.H.) y once melodías originales de Presley y su primer baile cinematográfico, Frankie y Johnny "divertirá a las chicas bonitas, tiene una música para mover los dedos, y tiene a Elvis" (Variety). Presley es Johnny, un cantante de barca cuya vida, según la novia y compañera cantante Frankie (Douglas), se convirtió en "una gran rueda de ruleta". Y está tan obsesionado con la rueda de la desgracia que cuando una gitana indica que una pelirroja sea su amuleto de la suerte, Johnny sale en busca de una. El problema es que Frankie es indudablemente rubia...y una rubia celosa. Cuando ve a Johnny con la curvilínea cabeza de zanahoria Nellie Bly (Nancy Kovack, de Los silenciadores), Frankie decide terminar su romance con Johnny y su gran número con un disparo.