Caroline y Max limpian el departamento de un acumulador compulsivo.
House y el equipo aceptan el caso de un hombre que empieza a llorar sangre. Entretanto, House entrevista prostitutas ya que su favorita, Emily, decidió casarse. Desesperado por la “compañía” de Emily, House intenta sabotear su relación.
Bob y Linda salen a la ciudad para una cita pero, para consternación de Linda, la idea de Bob de un romance resulta “trivial”. Mientras tanto, se inicia la salvaje persecución de una chinchilla luego de que la mascota de la escuela –que Louis debía cuidar– se escapa por la puerta principal.
Cuando el restaurante recibe una mala crítica gastronómica, los Belcher temen que la prensa negativa aleje a los clientes. Cuando Bob se presenta en la casa del crítico para que se retracte, su plan se descontrola rápidamente cuando los niños y sus compañeros dueños de restaurantes se presentan para apoyarlo.
Debido a la dura realidad y la difícil situación financiera que pasan como artistas, Bret deja la banda para conseguir un verdadero trabajo.