Siempre fui yo

A sus 22 años, Lupe debe dejar su vida tranquila en México, luego de recibir una noticia impactante acerca de su padre, lo que la obliga a viajar a Colombia. Allí conoce a Noah, el asistente de su papá, y juntos se embarcan en una aventura llena de misterio y música.

Lupe y Noah llegan al concurso para la primera ronda. Ella tiene continuos recuerdos de su padre y siente que todos son posibles sospechosos, pero termina pidiéndole a Noah que la acompañe y se enfrenta a uno de sus mayores miedos en cuanto sube al escenario.

Todo se complica en la segunda ronda del concurso y peligra el pase de Lupe y Noah a la semifinal. Para empeorar la situación, lo que empieza como una inocente aventura en un bar los enfrentará a una gran amenaza. Mientras tanto, Kevin recibe una visita sospechosa de su hermana.

Con una nueva oportunidad en el horizonte, Lupe y Noah encuentran la canción perfecta para su performance, pero esto despierta la furia de Pipe. Determinada, Angie intenta conquistar a Sammy, pero un pedido de Lupe arruina sus planes y Kevin debe acudir al rescate.

Lupe investiga una amenaza, y Noah pierde un objeto que puede poner en peligro su relación con ella. La semifinal del concurso está cerca, pero Pipe se queda sin voz y peligra su participación. Sammy y Kevin intentan acercarse.

En una jam session organizada por la producción del concurso, afloran las tensiones entre los participantes. Siguiendo una pista, Lupe cree descubrir a la persona que estuvo detrás de lo que le pasó a su padre. Mientras tanto, Noah debe lidiar con un viejo amor que reaparece para desestabilizarlo.