E.J. Bonilla

Una recaudación de fondos y una subasta de vino proporcionan el escenario perfecto para el próximo plan de ataque de Emily y Aiden, mientras que Victoria planea su próximo movimiento de forma estratégica. Mientras tanto, Jack, Declan y Amanda luchan contra lo que se avecina.

Durante el último episodio de la séptima temporada, suena solo música de los Rolling Stones, mientras Valens aúna fuerzas con Rush para encontrar a su hermana drogadicta secuestrada, Christina (NICKI AYCOX).

Nolan se enfrenta a un esqueleto de su pasado, y el papel protagonista de Daniel se ve desafiado mientras Emily y Aiden se abren camino a través de Grayson Global. Mientras tanto, el bautismo del bebé Carl saca a la luz nuevas preocupaciones para Jack y Declan.

Un pantallazo al 2006 hace que Victoria reciba una visita sorpresa de su madre distanciada, lo que desencadena recuerdos de su tumultuosa educación. Emily emprende su primera misión bajo el entrenamiento de Takeda, donde conoce a Aiden y se entera de su camino de venganza. El 2006 es también el año en que Nolcorp empieza a cotizar en bolsa, y Carl Porter se mete en aprietos cuando se cruza con la gente equivocada en los muelles.

Victoria comienza a tramar un plan que, sorprendentemente, involucra a Emily. Mientras, Emily se fija su próximo objetivo, y Declan descubre algo que puede amenazar el futuro del Stowaway.