T1, E2: El primer ministro Thorbjörn Fälldin se dirige a Estocolmo con premura para reunirse con los representantes del Gobierno y el Ejército. El comandante en jefe Börje Lagerkrantz, conocido por odiar a los bolcheviques, sostiene que Suecia es víctima de un ataque y que la única forma sensata de proceder es contratacar. Sin embargo, el ministro de Asuntos Exteriores Ola Ullsten recomienda precaución, por lo que Börje abandona la reunión furioso. En el submarino, la situación del capitán Peskov y su tripulación se vuelve cada vez más desesperada. La embarcación está realmente encallada y temen el castigo que puedan recibir al regresar a su país (si es que regresan). El Kremlin le ordena al capitán Peskov volar el submarino en caso de que los suecos lo intenten abordar, una solución tentadora a la mayoría de sus problemas.
