T1, E3: En Ipswich, las pruebas de ADN de tres de las víctimas asesinadas proporcionan a la policía de Suffolk un sospechoso: un hombre de la localidad llamado Steve Wright. Tras su detención, la policía necesita más pruebas que vinculen a Wright con los asesinatos de las cinco mujeres. El equipo forense trabaja sin descanso y se especula con que el pasado de Wright podría estar relacionado con otros asesinatos sin resolver. Este episodio explora cómo cambió para siempre el trabajo sexual de la calle en Ipswich y plantea la cuestión de si hemos aprendido las suficientes lecciones o si esto podría volver a suceder.
