No pares hasta tener suficiente
Amelia pierde el control de su drogadicción mientras falta al trabajo con su nuevo ligue, comienza a recetarse medicamentos y tiene problemas con la policía; Addison y Jake discrepan ante la imposible decisión de donar los órganos de su paciente o salvar la vida de su bebé nonato y sano; Violet comienza a trabajar de nuevo en Oceanside Wellness; Cooper, Charlotte y Mason forman un vínculo familiar, para disgusto de Erica.