Julee Cerda

Neal y Mozzie tienen un interés personal por el caso del Manhattan Mutual Bank, atacado por un virus que le hace perder 125 millones de dólares. Sara se encontraba entre los que perdieron todos sus ahorros. Mozzie elabora un plan para sacar a los ladrones de su escondite, pero dicho plan los convertirá a ellos mismos en objetivos.

El FBI tiene que resolver el secuestro de la hija de un senador que está retenida a cambio de un rescate.

Tras seguir al hombre que espiaba la casa de Carrie, que mató a Astrid y que colocó la bomba en la furgoneta de Sekou, Quinn se prepara para liquidarlo, pero Carrie quiere informar al fiscal general. Keane da una rueda de prensa para contraatacar contra los que tildaron a su hijo de cobarde que huyó cuando atacaban su unidad.

Saul le explica a Wellington que Simone Martin tiene intención de implicarlo en la conspiración para asesinar al general McClendon y que está vinculada a intereses rusos. Un atónito Wellington envía su carta de dimisión a la presidenta Keane.