Barney se pilla una buena cogorza y Ted y Robin se aprovechan de la situación haciéndole confesar secretos que lleva años ocultando. Mientras, Marshall intenta por todos los medios evitar una discusión con Lily.
Cuando Jess recibe una orden de alejamiento de su exnovio, Sam, se propone limpiar su nombre con la ayuda de Winston. Nick y Schmidt conspiran contra el dueño de un nuevo bar de moda que ha abierto en su misma calle.