Larry Hagman

Lynette cree que su madre va a casarse con un hombre horrible e intenta convencerla de que no lo haga. Durante la diálisis, Susan se hace amiga de un cascarrabias que ha perdido la esperanza de encontrar un donante. Bree se encuentra con la exnovia de Keith y descubre algo sorprendente de su pasado. Carlos se preocupa al descubrir que Gaby está obsesionada con una muñeca. Bob y Lee contratan a Renee, quien no tiene instinto maternal, para que decore la habitación de la niña que acaban de adoptar. Paul se la guarda a Beth y planea una escapada de los dos a una remota cabaña del bosque.

Lynette se planta cuando su madre, Stella (Polly Bergen), obliga a los Scavo a hacerse un retrato familiar con su horrible nuevo marido Frank (Larry Hagman). Aparece un donante de riñón para Susan cuando menos lo esperaba. Gabrielle no quiere enfrentarse a su pasado durante las sesiones de terapia ni descubrir qué le provoca esa obsesión con la muñeca. Bree sigue sin querer contarle a Keith que tiene un hijo. Mike se pone en contacto con el hijo biológico, Zach, para ver si tuvo algo que ver con el tiroteo de su padre adoptivo, Paul.

Sean y Christian celebran una cirugía importante y reciben una propuesta interesante de Burt Landau, un paciente rico, dueño de una empresa médica, que quiere implantes testiculares más grandes.

Mientras intenta preparar una segunda luna de miel para irse con Julia, Sean descubre que la niñera a la que han contratado, Monica Wilder, no pretende marcharse.

Dawn Budge vuelve a la clínica para una cirugía reconstructiva. Liz, enferma, consigue la ayuda que tanto necesitaba de alguien inesperado.