Mientras Frank se acerca (tal vez demasiado) a su inocente hija Sammi (EMILY BERGL), Fiona se lleva bien con Robbie, el hermano adicto a las drogas de Mike (NICK GEHLFUSS).
En la sala de castigo, Carl entabla una conexión con una niña problemática llamada Bonnie, mientras Sheila regresa de su viaje a la reserva con grandes planes para adoptar a los niños nativos americanos.
En un estado de salud cada vez más grave, Frank planea un "accidente" que le proporcionará un generoso pago para cubrir el coste de un posible trasplante. Carl se muestra muy motivado.
Fiona se prepara para una visita de su agente de la condicional. Ian vuelve, por fin, a la casa de los Gallagher.
Cuando Fiona se descarrila al irse de fiesta con los amigos degenerados de Robbie, la familia se pone manos a la obra para encontrarla, algo muy parecido a sus experiencias pasadas con Frank.