En 1989, una mujer de 33 años fue abatida a tiros en un callejón. El caso sin resolver vuelve a ser objeto de investigación cuando, tras el suicidio de un hombre, se encuentra una cinta de la víctima grabada para un servicio de citas.
Después de recibir pistas sobre el homicidio aún sin resolver de un policía, Rush reabre el caso. En su investigación, desvela un secreto que podría haber motivado a la persona más insospechada a perpetrar este crimen.
Rush y Scotty reabren un caso de muerte accidental de 1998 cuando nuevos indicios apuntan a que podría haber sido un asesinato. Los investigadores destapan intrigas familiares relacionadas con el dinero, el sexo y el poder.