Scott Allen Rinker

Ted cuenta que, cuando era un veinteañero, solía ir todos los años a la misma aburridísima fiesta de Halloween para ver si volvía a encontrarse con una chica que conoció un año, pero cuyo número de teléfono había perdido. Mientras, Robin va a una cita doble con Marshall y Lily.

Derek es testigo de un horrible accidente de coche y no pierde ni un minuto para salvarles la vida.

House y el equipo trabajan contrarreloj para salvar a una joven pareja, pero tendrán que ir más allá de los vínculos del matrimonio para encontrar la respuesta.

La UAC se pone a investigar cuando los cadáveres de varias personas desaparecidas aparecen en una zona aislada de los bosques de Idaho. Tras determinar que a las víctimas se las había llevado hasta el interior del bosque desde otro lugar, el equipo descubre que los criminales que buscan practican un deporte nuevo: la caza humana.

Los restos chamuscados de una becaria del Jeffersonian, hija de un antiguo científico del laboratorio muy respetado, aparecen en la incineradora del edificio. Al ser un caso en su propio lugar de trabajo, el equipo no puede descartar que alguno de sus propios compañeros sea el sospechoso, e interrogan a todos, desde los científicos más importantes del Jeffersonian hasta a los becarios compañeros de la víctima. Comienzan a cuestionarse si podría haber puesto en peligro su vida el hecho de que la becaria estuviera trabajando en la autentificación de artefactos del caso del hijo de la viuda, el asesino en serie. Sin embargo, los motivos del homicidio se complican cuando descubren un vínculo romántico entre la becaria y un empleado del Jeffersonian. Por otro lado, Booth acepta hacerse pasar por el novio de Cam y la acompaña a una comida familiar en la que atrae la atención de su hermana más de lo que cabría desear.