Tim DeKay

En el especial final de una hora, Rachel espera en el hospital con un ansioso Ross. Sin embargo muchas otras mujeres embarazadas pasan al paritorio mientras el doloroso parto de Rachel continúa.

Durante una visita al zoo, Hal tiene celos del exnovio de Lois; Dewey y Malcolm caen en el redil de los tigres; y Reese se enfrenta a una cabra; mientras, Francis se pierde durante un viaje y acaba trabajando en un rancho.

Sarah se encuentra con su responsable original, Kieran Ryker (TIM DeKAY) y teme que haga daño a sus seres más cercanos, incluida su madre (CHERYL LADD).

Megan y Tommy investigan un asesinato que a primera vista parece un caso de grave maltrato infantil. Sin embargo, los padres de la niña, Caleb y Laura Banks, afirman que su hija fue asesinada por el demonio después de que este la poseyera. El equipo debe separar la realidad de la ficción cuando la madre de la víctima ruega a Megan que impida que le ocurra lo mismo a su otra hija.

Cuando detienen a un viejo amigo, Earl decide compensar la mala acción número 18 de su lista: "le hice pasar un mal trago a Hank Lange en su fiesta de cumpleaños". Hank le pide a Earl que, antes de que le envíen a la prisión estatal, le haga pasar un día feliz que compense ese mal día. Hank le pide ver a su abuela, leer el periódico local y unos dónuts de su tienda favorita, pero conseguir todo eso antes de que acabe el horario de visitas va a ser mucho más difícil de lo que Earl pensaba. Mientras, Randy decide que tiene que darle sentido a su vida y empieza a buscar trabajo. Tras una serie de desastrosos primeros días de trabajo, entre los que se incluye un trabajo de camarero en la Cabaña del Cangrejo de Darnell, los hermanos deciden que el destino de Randy es estar siempre sin trabajo.