Dalí asume deberes ceremoniales antes de una fiesta en el Museo de Arte Miller en los Países Bajos. En el aeropuerto, se encuentra con Muhak en lugar de Hitonari, ¡y todo sale mal al instante!

Muhak, entristecido por la ruptura, le da a Dalí su reloj y promete volver a verse. Sin embargo, Dalí desaparece tras una misteriosa llamada. Muhak la encuentra en un lugar inesperado.

Se reencuentran en el Museo de Arte Cheongsong. Dalí da una cálida bienvenida, pero Muhak mantiene una fría distancia, recordando que son deudores. Las preocupaciones de Dalí no cesan.

Para recuperar su dinero del museo en problemas, Muhak usa métodos inusuales y choca constantemente con Dalí. Sin entender, Dalí vende su casa y deambula hasta encontrarse con Muhak.

Después de dejar a Dalí en el hotel, Muhak observa la lluvia desde la ventana y reflexiona. Al llamarla, menciona que la vista lluviosa es increíble, pero Dalí solo ve una realidad oscura.

La exposición está en riesgo por una noticia provocativa, pero Dalí logra cambiar la situación a su manera. Mientras tanto, Muhak, preocupado por Dalí, llega temprano al museo para ayudarla.