Varias personas muertas años antes reaparecen de repente en un pequeño pueblo de montaña. Sin haber envejecido y sin saber nada de sus propias muertes intentan volver al mundo como si nada, pero su regreso crea confusión entre sus seres queridos.

Simon se acerca a Adèle, pero Thomas se entera de que ha vuelto. Camille intenta encajar en su familia, pero se da cuenta de que la situación ha cambiado. Además, conoce a Pierre, una extraña pero carismática persona que parece haber predicho su vuelta.

Camille quiere dejar de esconderse y volver a tener una vida normal, así que se inventa una nueva identidad. Su hermana Lena se encuentra una extraña cicatriz en el cuerpo. Simon se acerca a Adèle. El pueblo está cada vez más inquieto.

La nueva vida de Camille como Alice va bien, pero la cicatriz de Lena sigue creciendo y quitándole energía. La policía se entera de que Julie esconde a Victor. Adèle vuelve con Simon y le presenta a su hija.

Los muertos dejan de esconderse, pero son incapaces de recuperar sus vidas. Frederik rechaza a Camille y Simon debe separarse de Adèle y Chloe de manera repentina. Victor busca a su asesino. Un personaje esquivo encuentra a Lena.

La ciudad se queda sin electricidad. Pierre crea una comunidad con Camille, a quienes algunos consideran una profetisa. Simon vuelve y se va con la misteriosa Lucy. Julie y Victor se refugian en casa de Laure. Lena se acerca a Serge.