Espíritu de Lucha cuenta la historia de los Mighty Mites, el equipo de fútbol americano de un orfanato en Fort Worth que, durante la Gran Depresión, pasó de jugar sin calzado, o incluso sin balón, a competir en el campeonato estatal de Texas. Durante la temporada ganadora estos candidatos a perder y su espíritu resiliente se convirtieron en la motivación de la ciudad, el estado y de toda una nación que necesitaba recuperarse, captando incluso la atención del presidente Franklin D. Roosevelt. El arquitecto de su éxito era Rusty Russell, un legendario entrenador de escuela secundaria, quien sorprendió a sus compañeros al decidir abandonar su posición privilegiada para enseñar en un orfanato. Pocos conocían el secreto de Rusty: que él mismo era un huérfano. Admitiendo que estos jugadores escuálidos no podrían vencer a otros equipos con su fuerza, Rusty desarrolló estrategias innovadoras que definirían luego el fútbol americano moderno.