La devoción de Joe por Beck lo conduce a una casa de verano misteriosa y a un encuentro con un adversario obsesionado, quien quiere poseer el corazón de Beck.

Joe ofrece consuelo a Beck, quien está destrozada anímicamente. Incapaz de desprenderse de la angustia y los celos que siente, Joe trata de comprender mejor sus temores. Beck sospecha que alguien la sigue.

Tres meses después de su separación, las cosas parecen irles bien tanto a Joe como a Beck. Sin embargo, una serie de acontecimientos amenazan con dinamitar la relación actual de Joe.

Beck siente que conoce toda la historia de Candace, el primer amor de Joe, e intentará todo para descubrir la verdad.

Paco y Beck ya no son el único problema con el que debe lidiar Joe: un investigador privado se entromete en su relación con Beck. La situación llega a un punto sin retorno.

Tras mudarse a Los Ángeles, Joe, ahora Will, trata de acomodarse a su nueva vida, pero el pasado lo persigue.

Joe se da cuenta de que Will Bettelheim no es todo lo que parece ser. Las consecuencias amenazan con obstaculizar su conexión con Love.

Joe intenta mantener una relación con Love y mantener su nariz fuera del negocio de Ellie, pero sus instintos lo superan.

Joe se encuentra desprevenido por una cita grupal mientras intenta adaptarse para compartir a Love con Forty.

Love lleva a Joe a un fin de semana de bienestar, donde él observa la dinámica de su familia. El invitado sorpresa de Forty inquieta a Joe.

Joe realiza una vigilancia para contener un posible problema, pero sospecha que alguien podría estar siguiéndolo.