Las chicas y la pandilla se preparan para el estreno de la película sobre la vida de Caroline. Caroline y Max piensan en su futuro en el restaurante y en el estado de sus vidas amorosas.
En este nuevo episodio, un profesor en pleno proceso de divorcio es arrestado en circunstancias sospechosas.
Caroline se sorprende al ver a su exnovio, Candy Andy, en una rueda de prensa para promocionar la película sobre su vida, lo que pone celoso a Bobby.
Caroline teme ser la causante de la mala suerte para el equipo de bolos de Bobby, y Max usa sus habilidades para jugar bolos para unirse al equipo de Bobby. Además, a Sophie le preocupa que su bebé no sea muy lista.
Max y Caroline regresan de su viaje y esta última descubre que le gusta el contratista que renueva el bar. Max se apresura para acompañar a Randy en el hospital.