Lady Tabares está a punto de enfrentar un juicio que cambiará su vida. Recuerda sus días de gloria como actriz y también su infancia dura.

Lady y Fátima, su madre, temen que Sofía las separe. Fátima le pide a Lady que regrese a la pensión y sale en busca de su expareja, Pacho.

Pacho conoce a Lady en el cementerio. Lady le da a Fátima el dinero que ganó vendiendo las rosas que se robó del cementerio. Lady le pregunta a Treinta y ocho que si se queda con ellos le puede decir papá.

Treinta y ocho le dice a Fátima que se tienen que ir de Medellín porque se metió en un problema muy serio. Didier le dice a Treinta y ocho que dos hombres armados lo están buscando.

Lady le pide a Treinta y ocho que no se muera y lo llama papá. Lady entra al quirófano y ve morir a Treinta y ocho. Lady y Fátima se despiden de Treinta y ocho con el corazón.