De camino a la librería, Koyomi Araragi se encuentra con Tsubasa Hanekawa, cuyo rostro está cubierto con vendas. El incidente le permite a Koyomi enterarse de lo que ha estado sucediendo en la casa de los Hanekawa, pero Tsubasa le ruega que no se lo comente a nadie, diciéndole que hará cualquier cosa para mantenerlo callado. Sin revelar las circunstancias familiares, Koyomi le habla del incidente a Oshino. Oshino le dice a Koyomi inmediatamente que debe confirmar la seguridad de Hanekawa. Se dirige a su casa, para darse cuenta de que...
