T1, E6: El juego esta vez envió a los Caballeros de Castelcorvo a la plaza del pueblo donde se encuentra la antigua torre del reloj. El reloj ha estado dañado por varios años y siempre marca la misma hora: 10.20 a.m. Hay un nuevo acertijo que descifrar, pero después de la discusión del día anterior, el grupo sigue dividido, de mal humor y con mucho orgullo. Betta exige una disculpa de Riccardo, pero él no está dispuesto a admitir sus errores... Seguir adelante en la búsqueda es más exigente de lo que se espera; por lo tanto, los héroes deberán dejar de lado las disputas y retomar el trabajo en equipo. Mientras los niños discuten, llegan Aldo y su pandilla. Los Caballeros se separan y huyen, perseguidos por los acosadores, pero después de haber cruzado las calles del pueblo se encuentran de nuevo frente al viejo reloj... y ninguno parece darse cuenta de lo que acaba de pasar. Los acosadores están de vuelta, los niños se separan y huyen una vez más... solo para encontrarse nuevamente en el lugar. Y otra vez. Y otra vez. Riccardo se da cuenta de que ha estado atrapado en un ciclo de tiempo, ya que incluso sus teléfonos marcan la misma hora: 10.20, al igual que el reloj dañado. Y, tal como en los videojuegos, hasta que no resuelvan el misterio y pasen el nivel en el que están, no podrán ir a la siguiente etapa. Para romper un ciclo de tiempo, no debes hacer lo mismo siempre, por eso Riccardo se disculpa con Betta y Matteo por su mala conducta. Superada esta situación y habiendo descifrado el acertijo, los Caballeros descubren que aún no termina. El rescate es que deben arreglar el reloj dañado. ¿Lo lograrán? Aquí usarán el misterioso dispositivo encontrado en el sótano de la tía Margherita. Ahora el ciclo de tiempo está desbloqueado y los Caballeros son libres de regresar a casa, donde encuentran una nueva tarjeta, una muy diferente a la anterior, esta vez lleva un código QR para que descarguen la aplicación del juego “Los Caballeros de Castelcorvo”. Un nuevo acertijo... ¡que deben descifrar en menos de tres horas!
