Amande Pigeon, de 26 años, en el paro y acribillada de deudas, malvive en Bruselas. Además, es aficionada al juego y le encanta arriesgarse. Ya que, para Amande, cualquier apuesta es buena. Enfin, todas menos una, quizás la más loca, la que todavía no se ha atrevido a arriesgar: la apuesta del amor.