
Podrá ser un niño torpe, pero cuando le retiran el yeso del brazo quebrado, Henry Rowengartner (Thomas Ian Nicholas), de 12 años, ¡puede lanzar una pelota de béisbol a 160 kilómetros por hora! No solo eso, los Chicago Cubs se enteran de la habilidad de Henry y lo quieren para que ayude a sacar al equipo del último puesto. Con la ayuda de un avejentado as del lanzamiento (Gary Busey), ¡Henry podría lograrlo!