En el barrio afroamericano de Sag Harbor, Nueva York, Charles Blakey (Corey Hawkins) está sin trabajo, sin suerte y al borde de la ejecución hipotecaria de la casa que heredó de su familia. Un misterioso hombre de negocios, Anniston Bennet (Willem Dafoe), llama a su puerta con una extraña y lucrativa propuesta: alquilar su polvoriento sótano durante el verano y recibir el dinero suficiente para saldar sus deudas para siempre. Una vez que Charles acepta, se ve conducido por un aterrador camino que lo enfrenta a los fantasmas de su familia y lo atrapa en un siniestro juego, donde la raza, sus traumas y la raíz de todo mal ocupan el centro de la escena.