Lacey Beeman

Rush reabre el caso del asesinato de una niña de 16 años después de que un preso relata una conversación que escuchó hace 22 años, insinuando que el hombre equivocado está cumpliendo condena actualmente.

Una serie de asesinatos en la zona rural de Virginia lleva al equipo de la UAC a investigar un vínculo entre la actual ola de asesinatos y un caso similar de hace dos décadas.

Mientras el aparentemente inofensivo trabajo de vigilancia de Catherine da un giro mortal, Adam considera hacer el máximo sacrificio para salvar a Kono.

El CSI se sorprende cuando la evidencia y los testigos señalan a John McEnroe como sospechoso de asesinato pese a su coartada irrefutable y, como la investigación de Mac causa una tormenta política, el equipo teme que no le permitan testificar.