Como sobrecargo en jets privados, Elisa Blix lleva un estilo de vida glamoroso volando alrededor del mundo con los ricos y famosos; equilibra una vida laboral en aviones con las exigencias de criar a dos hijos pequeños con su esposo, Fred. Un día que llega tarde para recoger a su hija, Lucia, Elisa conoce en las puertas de la escuela a una nueva mamá misteriosa, Rebecca, quien convence a Elisa para que deje a Lucía ir a una pijamada improvisada con su hija, Josephine. Pero cuando Elisa y Fred van a buscar a Lucia al día siguiente, se horrorizan al encontrar la casa de Rebecca vacía. La casa no es de Rebecca, y Lucía desapareció con Rebecca y Josephine. Fred y Elisa viven la peor pesadilla de cualquier padre. La policía dice que no hay rastros de Rebecca y que todo lo que le había dicho a Elisa era mentira.

Cinco días después de la desaparición de Lucia, la esperanza y el miedo llegan a Elisa y Fred en forma de una carta de rescate. Elisa insiste en que deben reunir el dinero de inmediato, pero Fred dice que deberían seguir los consejos de la policía en caso de que fuera falso. En el trabajo, un cliente de Fred es sospechoso de lavar dinero en nombre de un grupo criminal. ¿Podría su caso estar vinculado con la desaparición de Lucia? La periodista Selma determina que la carta es un callejón sin salida y continúa investigando a Elisa, de quien sospecha que podría tener secretos relacionados con el secuestro de su hija. Mientras tanto, un prisionero misterioso con un interés peculiar en la desaparición de Lucia intenta contactar a Elisa, y la policía descubre imágenes aterradoras de vigilancia que muestran a Lucia en un lugar que nadie podría haber esperado.

Selma cree que Elisa oculta algo sobre su pasado, y sus investigaciones revelan que Elisa creció en una comuna religiosa, una comuna de la que huyó a los dieciséis años para reinventarse. Selma escribe un artículo que genera especulaciones tóxicas en línea de que la propia Elisa es responsable del secuestro de Lucia. El matrimonio de Fred y Elisa comienza a desmoronarse, pero tienen que permanecer concentrados cuando la policía descubre imágenes de vigilancia de Lucia en Francia. Mientras tanto, en el sur de Francia, Rebecca, cuyo nombre verdadero es Nina, le dice a una traumatizada Lucia que ella es su verdadera madre. Lucia solo debía quedarse con "esa otra familia" por poco tiempo mientras Rebecca estuviera enferma, pero no la devolvieron. A medida que Elisa parece más sospechosa, nos preguntamos: ¿podría Nina estar diciendo la verdad?

Siete semanas después del secuestro de Lucia, los artículos de Selma generan un vórtice de especulaciones tóxicas en línea que giran en torno a Elisa, quien continúa atrayendo la atención de los medios mientras busca a su hija; a pesar de la frustración de Fred por el intenso escrutinio de los medios sobre sus vidas. Convencida de que aun faltan cosas por averiguar, Selma regresa a la comuna donde Elisa creció y descubre un secreto enterrado que podría resolver el rompecabezas del secuestrador de Lucia. Pero el pasado también está alcanzando a Nina, y se ve acorralada cuando el hombre que la ayudó a secuestrar a Lucia regresa para chantajearla. Mientras Elisa y Selma se unen, Nina pone en marcha un plan para escapar, que amenaza con separar para siempre a Lucia de Elisa. ¿Podrán Elisa y Selma llegar a tiempo con Lucia?

Cinco años antes de que secuestraran a Lucia, una serie de acontecimientos trágicos unen a Elisa y Nina, situándolas a ambas en un camino que finalmente conducirá al secuestro de Lucia. En la actualidad, Elisa y Selma llegan a Toulon mientras Fred y la policía se apresuran para descubrir dónde están. Pero encontrar a Lucia en la ciudad es como intentar encontrar una aguja en un pajar, y es una carrera contra reloj para encontrar a Lucia, antes de que una Nina, cada vez más inestable, pueda escapar con ella. Sin embargo, de vuelta en las bastidas, Lucia se da cuenta de que Nina le ha estado mintiendo y no la acompañará. ¿Podría Lucia estar en grave peligro?