La chef y propietaria de restaurantes, Erin French, se prepara para una temporada memorable con un menú especial que incluye ingredientes de temporada. Erin se conecta con los agricultores locales para crear un menú que sus invitados no olvidarán.

Cuando las restricciones de cuarentena de COVID-19 hacen que The Lost Kitchen tenga que permanecer cerrado, Erin debe reinventarse. Lanza un mercado de agricultores sin contacto y hace un servicio de almuerzo al aire libre.

The Lost Kitchen está listo para relanzar el servicio de cena y Erin espera recrear su magia en un nuevo entorno al aire libre, y prepara recetas con langosta de Maine. Cuando finalmente llega el día, hay algunas cosas que Erin no puede planear.

Erin y el personal vuelven al trabajo después de que un falso positivo los obligara a cancelar la primera cena de la temporada. Comienza la construcción, pero es más desafiante de lo que Erin imaginó.

La temporada está comenzando a cambiar y Erin hace un menú para reflejar la llegada del otoño con un plato de cerdo y una sopa de calabaza. La construcción está retrasada.

La construcción está lista justo cuando bajan las temperaturas. Erin prepara un servicio especial para el debut y habrá manzanas en cada plato.