T1, E6: La Luna, formada hace 4.500 millones de años, es inusualmente grande en relación con la Tierra. Este tamaño influye en las mareas y en la dinámica rotacional y orbital de la Tierra, y contribuye a la estabilidad planetaria. El proceso de bloqueo de las mareas sincroniza la órbita de la Luna y la rotación de la Tierra, favoreciendo un clima estable que ayuda a mantener la vida.
